Turquía ha mostrado su rechazo a la prohibición del velo integral en Francia, algo que no ha sentado nada bien al primer ministro del país, que ha rechazado totalmente esta prohibición en Francia, especialmente porque va en contra de la libertad religiosa de cada uno. Con esta decisión Francia se ha ganado la enemistad absoluta de Turquía, un país que intenta entrar en la UE y que no cuenta con el apoyo de Francia, que cada vez se distancia más de Turquía en diferentes aspectos.

Desde hace un tiempo tenemos mucha polémica por el uso del burka, tanto en Francia como en otros países y Francia ha dado el paso para prohibirlo y multar a las mujeres que lo lleven. Erdogan lo tiene muy claro y considera que es una medida desproporcionada y que impide que las mujeres multadas puedan tener libertad religiosa en Francia. Que una mujer lleve un burka no debe molestar a los demás, ya que es algo que las creencias de la mujer.

Se puede ver desde diferentes puntos de vista, pero lo que no resulta coherente es que no se permita que las mujeres llevar el burka, ya que tienen libertad para poder hacerlo tranquilamente. En Francia lo que se ha dicho es que el burka simboliza la opresión de la mujer musulmana y por eso lo ha prohibido en todo el territorio, una acción con la que Turquía no está ni mucho menos de acuerdo, especialmente porque impide que se pueda llevar a cabo la libertad religiosa de cada uno.

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